En el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) ven “atractivo” diversificar las monedas en que Uruguay emite su deuda. “Puede haber emisiones (de bonos) en dólares”, pero “también evaluamos con buenos ojos emisiones (de títulos de deuda) en moneda de otros países como euros y yenes”, adelantó a El País el director de la Unidad de Gestión de Deuda del MEF, Herman Kamil.
Desde hace casi 10 años, la unidad se maneja con una “regla implícita de liquidez precautoria, muy conservadora” que implica tener el dinero para cubrir los servicios de deuda (pagos de intereses y amortizaciones) de los 12 meses siguientes, indicó Kamil.
“Tenemos prefinanciado 2016, pero a medida que empiezan a haber vencimientos (de deuda) hay que recomponer la liquidez”, agregó.
A fin del año pasado, la Tesorería contaba con una “caja” (liquidez) equivalente a 5,5% del Producto Interno Bruto (PIB), unos US$ 3.000 millones, mientras que las necesidades de financiamiento para 2016 son de 3,8% del PIB (US$ 2.200 millones, de los que US$ 2.000 millones son servicio de deuda), según las cifras de la Unidad de Gestión de Deuda.
Para este año, la unidad prevé realizar emisiones de bonos (en el mercado local y el internacional) por el equivalente a unos US$ 1.500 millones.
Esa cifra “va a depender mucho de las condiciones de mercado”, dijo Kamil. Actualmente, las turbulencias en los mercados financieros han incrementado el riesgo país (que es lo que pagan los bonos uruguayos por encima de la referencia de Estados Unidos). El viernes, el riesgo país cerró en 321 puntos básicos, luego que el jueves tocara el máximo desde mediados de julio de 2009 (329 puntos básicos).
La idea de emitir este año deuda en euros y yenes “no es solo por un tema de tasas bajas” (las tasas de interés de referencia de la zona euro y de Japón son hoy menores que las de Estados Unidos) “sino por modificar las fuentes de financiamiento de manera de tener opciones abiertas”, remarcó Kamil. La última vez que Uruguay emitió un bono en euros fue en 2005. En cambio en yenes, hizo una emisión en 2007 y otra en 2011.
Actualmente, Uruguay tiene en circulación un título en euros con vencimiento al 2019 y dos en yenes, uno que vence en 2017 y otro que vence en 2021. Luego tiene un título en pesos chilenos que vence el próximo 15 de marzo.
El resto de los bonos globales (que son los que se emiten en el mercado internacional) están en dólares y Unidades Indexadas (UI) a la inflación, es decir pesos ajustados por la evolución de la inflación.
La composición de la deuda del gobierno central (no está contemplada la del Banco Central ni la de los entes) por monedas a fin de diciembre era: 52% en dólares, 35% en UI, 6% en pesos nominales, 4% en Unidades Reajustables (UR, que ajusta según la evolución de los salarios), 2% en yenes y 1% en euros. A su vez, el 26% fue colocada en mediante emisiones locales y el 74% restante en los mercados internacionales.
En lo que va del año, México y Chile han probado emitir con éxito en euros. En el caso de Chile colocó el equivalente a US$ 1.300 millones en euros, a un plazo de 10 años y a una tasa de 1,966%. Perú, que ya emitió en euros el año pasado, sondea hacer otra emisión este año.
Más “caja”.
Más allá que para mantener la regla de prefinanciamiento necesita salir al mercado este año, el MEF evaluará las condiciones ya que cuenta con otras fuentes de financiamiento.
Es que si los mercados se complicaran más aún y se cerraran o la tasa a pagar fuera más alta de lo esperado, el país cuenta con préstamos contingentes. Este tipo de créditos ya están aprobados por varios organismos multilaterales (CAF, Banco Mundial, Banco Interamericano de Desarrollo) y solamente se desembolsan si el gobierno lo requiere.
Este “colchón” de liquidez adicional suma el equivalente a 4% del PIB, es decir unos US$ 2.200 millones.
Por otro lado, el mercado local sigue con buena demanda en las colocaciones que hizo el MEF en lo que va del año.
El 12 de enero emitió un tramo de la Nota del Tesoro en UI con vencimiento al 2018 y la demanda triplicó lo ofertado por el MEF. El miércoles pasado, volvió a colocar un tramo de esa Nota y la demanda más que triplicó la oferta. A su vez, el 26 de enero emitió una Nota del Tesoro en UI con vencimiento a 2020 y la demanda más que cuadruplicó la oferta.
Algunos fondos del exterior vendieron
Tras la colocación de la Nota del Tesoro en UI con vencimiento a 2018 el pasado miércoles, el director de la Unidad de Gestión de Deuda del Ministerio de Economía, Herman Kamil había manifestado a El País que la “demanda” sigue “robusta” en el mercado local por parte de los residentes.
Es que de parte de los no residentes, ha habido algunas ventas de deuda uruguaya y en otros casos, no renovaron su interés en emisiones locales tras algunos vencimientos en enero.
Hay un “menor apetito por monedas locales” de emergentes a nivel internacional y eso también determinó que “hubo algún tipo de venta (de deuda uruguaya) por parte de no residentes”, había informado Kamil.
De todas maneras, indicó que esas ventas “no fueron significativas” para lo que es el stock de deuda que está en manos de no residentes y que están “en línea con los mercados internacionales”.
Esas ventas encontraron compradores en las AFAP uruguayas. Eso también “puede dar lugar a alguna variación de la tasa” (de rendimiento al alza), dijo.
El director de la Unidad de Deuda había dicho que además, en algunos casos los no residentes, no renuevan su posición de deuda uruguaya en moneda local.
Eso se verificó en vencimientos de títulos que hubo a principio del año.
Pese a ello, las emisiones locales encuentran una “demanda robusta de parte de residentes” y “el mercado sigue funcionando en forma fluida, hay liquidez y puntas de compra y venta”, dijo el director de la Unidad de Gestión de Deuda.
Fuente: http://www.elpais.com.uy/economia/finanzas/gobierno-emitir-deuda-euros-yenes.html